¿Qué es una agencia de viajes minorista? ¿Qué servicios ofrece y cuáles son sus funciones? ¿Qué diferencias hay entre una agencia de viajes minorista y una mayorista? Vamos a contestar a estas y otras preguntas en el siguiente post.
Si te encuentras leyendo estas líneas es evidente que estás interesado en el apasionante mundo del turismo.
Bien como cliente, porque estás pensando en organizar tus próximos viajes y quieres saber qué actor dentro de este sector te va a ofrecer el mejor servicio, o bien como emprendedor, que está pensando en montar una agencia de viajes.
El sector turístico ofrece grandes oportunidades para los emprendedores. Según un informe de la CEOE, en el año 2019, antes de la pandemia del Covid 19, el turismo suponía ni más ni menos que 12,4 por ciento del Producto Interior Bruto en España.
Uno de los sectores que más riqueza y empleo crea. El estallido del coronavirus ha supuesto un descenso de la actividad pero no cabe ninguna duda que este sector volverá a ser el más competitivo de la economía española. De hecho, ya se observan indicadores que así lo atestiguan.
Claro está que para introducirse en el complejo mundo del turismo son necesarios unos conocimientos previos del sector, contar con las herramientas tecnológicas adecuadas y un cierto grado de especialización que permitirá introducirse en un nicho de mercado que sea rentable.
Pero lo bien cierto es que oportunidades hay, y muchas.
¿Y cómo se podría definir qué es una agencia de viajes minorista?
Lo primero que podríamos decir es que se trata de una agencia de viajes que tiene un contacto directo con ese cliente que está planificando sus vacaciones, su viaje de negocios o simplemente una escapada de fin de semana.
La agencia de viajes minorista le vende unos servicios o determinado paquete turístico, que a su vez ha comprado de una agencia de viaje mayorista. La agencia minorista siempre venderá al cliente final, nunca a otras agencias.
¿Significa esto que siempre vende un paquete turístico cerrado, sin posibilidad de modificarlo? En absoluto. La agencia de viajes minorista podrá adaptar ese producto turístico a las necesidades de su cliente.
Es el contacto más cercano, el último eslabón antes de emprender rumbo hacia cualquier destino.
Estamos hablando de viajes, pero también se pueden ofrecer todo tipo de actividades, experiencias, hoteles, vuelos… Y todo aquello que solicite el cliente.
La relación de la agencia minorista con el cliente es cercana y humana, aunque en ocasiones los servicios o el paquete turístico se compren vía internet.
Es más. Para satisfacer las exigencias del cliente actual, ese que lo quiere todo y al instante, los responsables de este tipo de agencias de viajes acompañarán al cliente final en todo aquello que pueda necesitar durante el viaje y una vez esté ya en el destino.
Es decir, los minoristas pueden vender productos que les llegan de los mayoristas pero al mismo tiempo puede crear los suyos propios. Tienen la capacidad de adaptarse al presupuesto que les exija su cliente.
Como hemos visto en el apartado anterior, este tipo de agencias suelen ser de pequeño tamaño y se dedican a comercializar productos diseñados por mayoristas y también grandes touroperadores si bien son capaces de modificar el producto en función de las necesidades del cliente. Dentro de estas agencias podemos encontrar de varios tipos:
Que las podemos definir como aquellas que venden sus productos para que los clientes se desplacen a cualquier lugar del mundo. Estas agencias pueden vender todo tipo de productos.
Un billete de avión, un traslado desde el aeropuerto hasta el hotel, el alojamiento y múltiples actividades.
Las agencias receptivas son aquellas que están más cerca del destino y acogen a los turistas o viajeros en el lugar que han elegido previamente.
Son estas las que pueden resolver las dudas del cliente en el lugar de destino. Una de las claves actuales en el sector turístico es poder ofrecer servicios en directo. Por ejemplo, vender unas entradas para un espectáculo o parque temático.
Por supuesto que el sector turístico no está ajeno al mundo online. Es más, nos atrevemos a decir que ha sido uno de los pioneros en ofrecer servicios en la gran red.
Las agencias online u OTAS no venden sus productos de manera física, sólo online. Necesitan de plataformas avanzadas donde se pueda incorporar la venta cruzada y otros muchos servicios para ser rentables y ofrecer satisfacción a sus clientes.
Es cierto que las agencias de viaje online venden sus productos sin mediar contacto físico pero no es menos cierto que tienen una cuidada atención al cliente.
No es necesario que esta atención al cliente sea física. Se puede realizar a través de chatbots. Lo que diferencia a estas de otras agencias de viaje minoristas es que pueden estar vendiendo sus productos turísticos las 24 horas del día durante los 365 días del año.
Son la que sólo, para vender su producto, mantienen un contacto físico en el cliente. A pesar de la digitalización en la que estamos inmersos, todavía existen muchas agencias de viaje físicas.
Su gran ventaja es que la atención al cliente es muy personal. Pero su desventaja, sobre todo si las comparamos con las OTAS, es que sólo se pueden vender productos en “horario de oficina”.
Bien es cierto que las agencias físicas también han de estar conectadas vía internet con los grandes operadores turísticos o las mayoristas para comercializar los productos que ofrecen.
Eso sí. Tienen una gran capacidad para crear su propio producto.
Todos los tipos de agencias que hemos visto hasta ahora podemos considerarlas “generalistas”. Pueden llegar a ofrecer una gran gama de productos.
Pero la competencia es muy grande y las agencias que se están creando están optando por la especialización, por buscar un nicho de mercado que les sea rentable.
Una agencia de viajes se puede especializar en deportes extremos; otra en ofrecer actividades en una determinada situación geográfica; las hay que sólo comercializan estancias en el extranjero para aprender inglés… y así podríamos enumerar cientos y cientos de casos.
Seguimos con la especialización porque es la tendencia que están siguiendo habitualmente las agencias de viaje minoristas.
Puedes encontrar agencias que se dedican única y exclusivamente a vender actividades en un determinado lugar. La gran ventaja para el cliente es que todas las actividades están reunidas en un mismo sitio y son muy fáciles de encontrar.
Actividades como un paseo en trineo de perros o en moto de nieve. Un paseo a caballo, rafting…
Esto es lo que llamamos el turismo de experiencias, una tendencia en auge porque conecta al individuo con espacios libres.
Pero la especialización puede ser también en lugares cerrados. Un buen ejemplo son aquellas agencias especializada en el turismo de balnearios o spa.
Determinadas empresas sólo comercializan viajes de fin de curso y se dirigen exclusivamente a ese público.
Es hora de hablar de las funciones que debe tener una agencia de viajes minorista. Lo cierto es que se podría resumir en “hacer felices a sus clientes”.
Una determinada persona o familia puede haber estado preparando el viaje de sus sueños. Puede haber estado ahorrando durante mucho tiempo para trasladarse a un determinado destino, alojarse en tal o cual hotel y realizar un sinfín de actividades que les procuren placer, relax y diversión.
Pero, claro, el producto y el servicio han de ser inmejorables para una grata experiencia del cliente. Si no sale todo a la perfección se está jugando con los sueños de una determinada persona.
Para el cliente puede ser desastroso. Preparar un viaje y que no todo resulte según sus expectativas.
Pero no menos desastroso puede ser para la agencia de viajes minorista. En el caso de que el producto no sea el adecuado y la experiencia resulte muy poco agradable, recibirá malas opiniones de este cliente que podrán ser leídas por otros y perder un montón de oportunidades de venta.
Ya ha quedado más que demostrado que los clientes leen antes las opiniones de otros viajeros antes de decidirse por comprar un determinado paquete turístico. Si las opiniones son negativas las posibilidades de venta se reducen.
Estas opiniones negativas se pueden ver reflejadas en la misma página web de las agencia de viaje, pero también en un sinfín de redes sociales que pueden acabar con la reputación del negocio.
Entonces, ¿qué es lo que tiene que hacer la agencia minorista?
Lo cierto es que tanto una agencia de viajes minorista como una mayorista tienen una función en común. Esta función no es otra que crear productos turísticos que respondan a las necesidades de los clientes.
Pero también podemos encontrar algunas diferencias.
La primera de ellas es que los mayoristas o touroperadores diseñan paquetes turísticos que ofrecen a los minoristas para que los vendan al cliente final y, a ser posible, a precios competitivos. Lo que no hace nunca una agencia mayorista es vender al cliente final.
Para vender estos paquetes turísticos se utilizan, como ya hemos mencionado anteriormente, las integraciones XML/JSON. ¿Qué son las integraciones XML/JSON? Simplemente un lenguaje informático que permite intercambiar datos a una velocidad increíble.
Vamos a poner un ejemplo para que se entienda mejor. Quieres realizar un viaje a la nieve. Lo primero que haces es buscar en una determinada plataforma los días en los que vas a viajar.
A continuación te aparece la posibilidad de comprar el forfait. Instantes después tendrás la oportunidad de comprar un seguro.
La plataforma también te ofrecerá la posibilidad de alquiler el material o comprar tickets para comer en pista. Y todo esto se ofrece a una velocidad endiablada gracias a las integraciones XML/JSON que permiten incorporar a la oferta productos de muchos proveedores.
Por tanto, volviendo a las diferencias entre minorista y mayorista, podemos deducir fácilmente que los clientes de la agencia minorista son los viajeros.
Las minoristas venden paquetes turísticos y a cambio se llevan una comisión u obtienen un margen por la operación. Son unos intermediarios aunque bien es cierto que gozan de libertad para confeccionar un paquete turístico personalizado a un determinado cliente. El minorista obtiene mejores precios si está asociado a un mayorista.
Lo que espera un cliente de una agencia minorista es completa satisfacción y alejarse de todas las preocupaciones. Quiere contratar toda una serie de servicios y que cuando llegue a destino los pueda disfrutar tal y como se ha comprometido la agencia de viajes minorista. Tan sencillo como eso.
Claro está que actualmente hay un sinfín de agentes turísticos dispuestos a ofrecer los mejores productos a los mejores precios. La competencia está a la orden del día, igual que en cualquier sector productivo de España.
Así que a veces el cliente se “siente bombardeado” por un montón de ofertas a precios muy parecidos y se ve en la tesitura de elegir. Una elección que a veces resulta difícil.
Lo primero que tiene que hacer el viajero si quiere contratar un producto turístico es decidir si quiere acudir a una agencia física o a una agencia online. Nos atrevemos a decir que el canal online está ganando adeptos a pasos agigantados.
Era una tendencia que se veía venir pero la pandemia del Covid 19 la ha acelerado. Debido al confinamiento, muchos sectores de la población que todavía tenían recelos de comprar online se han visto obligados a hacerlo.
Cuando han hecho su primer pedido online han podido comprobar que son compras seguras, que no hay ni trampa ni cartón y que se puede confiar plenamente en el sector del comercio electrónico.
Sea como sea –una compra física o una compra online- hay que buscar la mejor opción. En la especialización está la clave. Si se va a realizar un viaje de negocios hay que acudir a las plataformas que ofrezcan este servicio. En el caso de que optes por los viajes de aventura, no lo dudes más y busca a los mejores.
¿Cómo saber que son los mejores? Una muy buena opción es hacer caso de lo que han experimentado otros clientes. Busca las opiniones que han dejado. Si te convencen, adelante, no lo dudes.
Pero no sólo hay que fijarse en las opiniones. Hay que desconfiar de aquellas agencias online que no reflejan claramente su número de teléfono y su correo electrónico.
Una buena manera de sabe que no estás ante una estafa es llamando o escribiendo un correo electrónico.
Lo que da mucha confianza es saber si tienen diversas formas de pago y si su página web utiliza el protocolo seguro https.
Y el precio, claro. Antes de decidirse por cualquier paquete turístico hay que comparar los precios. Gracias a internet todo esto es mucho más sencillo. Desde la comodidad de tu casa, sentado en tu sofá y con tu familia puedes ir comparando ofertas y precios.
Acabamos ya. En este post hemos querido contarte todo sobre las agencias de viaje minoristas.
Hemos hecho una definición de este tipo de negocios. También hemos hablado sobre los tipos de agencia que existen haciendo especial hincapié en las físicas y en las online o también llamadas OTAS que, poco a poco, están ganando la partida gracias a las nuevas tecnologías.
Hemos visto algunos ejemplos de agencias de viaje minoristas y te hemos dado algunos consejos sobre cómo elegir la mejor opción si estás pensando en realizar el viaje de tus sueños. Por último, también hemos visto las diferencias entre las mayoristas y las minoristas.
Antes de finalizar, una pregunta: ¿qué es lo que buscas en una agencia de viajes minorista que se dedica a vender el producto turístico al cliente final?
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